Desde un punto de vista biológico, puede considerarse que el propósito de la vida es la supervivencia y la reproducción. Los organismos vivos están impulsados por la necesidad de transmitir su material genético a la siguiente generación. Combatir enfermedades ayuda a prevenir muertes prematuras y prolonga la vida de las personas, permitiéndoles vivir vidas más saludables y satisfactorias. Existen muchas enfermedades crónicas que, a pesar de los avances hechos hacia su cura, ofrecen tratamientos que transcurren en forma demasiado lenta. La extensión de la esperanza de vida ha hecho que el número de pacientes con enfermedades crónicas e insuficiencia orgánica en etapa terminal haya crecido. El trasplante es un enfoque que ha probado ser eficaz para el tratamiento de la insuficiencia orgánica en la etapa final; sin embargo, el desequilibrio entre los donantes y receptores y la oferta y la demanda de órganos humanos son un cuello de botella para el t...
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